Por Fabian Muñoz
El Barcelona desde la partida de Lionel Messi ya no es aquel gran equipo que podía tener en sus filas a los mejores jugadores del mundo, por lo que es común que desde hace algunos años, con la economía en rojo y sin poder adquirir demasiado, se acude a las juveniles como rescate y no como opción de recambio como fue en algún momento.
Sin embargo, el famoso equipo de Pep Guardiola no hubiera sido posible si La Masía, ojeando y captando futbolistas desde jóvenes para formarlos. Tal es el caso del mejor futbolista de la historia, que fue convencido a los 13 años para que dejara Argentina y se convierta en futbolista en España.
También está el otro lado de la moneda y es aquellos grandes jugadores que no pudieron hacerse un lugar en el primer equipo de Barcelona y rápidamente pasaron al olvido. Gai Assulin, era conocido como el “Messi hebreo”, pero una lesión estancó su crecimiento. Incluso el más parecido al rosarino era Bojan Krkic, que pasó sin pena ni gloria por Cataluña.
Ibrahim Afellay, la joya holandesa del Barcelona, que era nombrado a ser uno de los mejores futbolistas del mundo. El equipo blaugrana pagó 3 millones de euros por su fichaje y hasta jugó la final de la Champions League 2011, que triunfó por 3-1 contra Manchester United.
Se enfrentó a Diego Bejarano, durante el paso del boliviano por el fútbol de Grecia, él para Olympiacos y el jugador de Bolívar para Panetolikos e incluso tienen una foto juntos. Actualmente se encuentra retirado desde 2020 y cada tanto realiza tareas de comentarista para la TV neerlandesa.
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