Primera División de Bolivia

El triunfo que generó malestar en los hinchas de The Strongest

El Tigre ganó ante Guabirá, pero con lo justo y los simpatizantes no se fueron contentos del Siles.

Por Fabian Muñoz

El Tigre ganó ante Guabirá, pero con lo justo y los simpatizantes no se fueron contentos del Siles.

The Strongest ganó el partido que debía para ponerse al día. En este caso, tenía menos encuentros disputados que el resto de sus rivales que estaban por debajo del Tigre en la Liga Tigo. En este caso, tuvo que jugar su partido ante Guabirá, que había sido suspendido. Ganando se quedaba con una diferencia de cinco puntos con Nacional de Potosí y se iba a siete de Bolívar que no pudo ganar su partido disputado el día lunes.

 

El Tigre se encontró con un equipo débil y aprovechó a generarle situaciones por todos lados. Con Fabricio Quaglio como el nuevo estandarte, The Strongest empezaba a ser el que manejaba los hilos del partido. Aun así, se empezó a incomodar porque el gol no llegaba y Elder Arauz era la figura de Guabirá sacando todas las pelotas. Con el partido así, solo se podía abrir con una jugada profunda en el área.

Así terminó siendo, ya que un gran centro por la izquierda la dio la posibilidad a Junior Arias de ganar de cabeza y poner el uno a ero para los dirigidos por el Claudio Biaggio. El entrenador argentino hacía su debut de su segundo paso por el Tigre, por lo que la expectativa era muy alta. Los mismos hinchas se morían de ganas de poder ver jugar al equipo del Pampa, quien se volvió a poner el traje de entrenador. 

El triunfo parecía encaminarse de forma contundente, aunque costó más de lo normal. El partido fue siempre para Tigre y eso le hizo mucho ruido al hincha. ¿Por qué? El arquero de Guabirá era figura y Triverio no podía liquidar el cotejo. El argentino puso el segundo gol del partido, pero fue rápidamente anulado por posición adelantada. En ese caso, The Strongest tuvo que conformarse con un uno a cero y casi sufriendo el empate sobre el final.

 

¿Cómo reaccionó el hincha?

Justamente, los simpatizantes se fueron felices a medias. Esto se debe a que creen que el equipo sobró la situación, ya que no liquidaron el encuentro en ningún momento. Esto generó incomodidad, pero al ser el primer partido de Biaggio, tuvieron paciencia. 

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