Recién llegado a Bolivia y ya quiere manejar todo el club

Muchas veces ocurre que los entrenadores apenas arriban a los clubes quieren generar un cambio drástico en las formas de jugar. Si bien cuando llega es para encontrar la mejor salida posible, los directores técnicos suelen realizar muchas alteraciones en los clubes de fútbol. No solo en lo deportivo, sino buscan también encontrar un mejor ambiente emocional para sacar partidos adelante en cuanto al armado de grupo.

En Bolivia, la llegada de un entrenador se gesta mayormente por los malos resultados, como en casi todos los países. Aun así, el caso de este equipo en particular es primordialmente para realizar un cambio de rumbo también dirigencial dentro del equipo.

Hablamos del caso de Deportivo Guabirá, que notificó la llegada de Miguel Portugal. El español que tuvo grandes pasos por España, donde fue ayudante de campo de Vicente del Bosque en el Real Madrid. Aunque tuvo sus pasos como director técnico solo al dirigir a Racing de Santander en entre 2006 y 2007, también llegó a pasar por Bolivia en precias ocasiones.

El entrenador tuvo pasos importantes en otros equipos. Fue entrenador de Jorge Wilstermann cuando arribó a Bolivia allá por el 2019. Justamente, continuó su legado en el país, cuando al año siguiente pasó a dirigir a Royal Pari hasta mediados de 2021. Recientemente arribó a Deportivo Guabirá, con el fin de encontrar un poco de orden y es por eso que también, en una conferencia de prensa, se dirigió a los dirigentes por el manejo del club. 

<br/>¿Qué fue lo que dijo? 

Portugal fue presentado y luego dio a conocer como se sentía con la asunción como entrenador y también del nivel que tiene la dirigencia de Guabirá; “A todo entrenador le gusta ir a un equipo donde haya dirigentes serios, donde haya buena infraestructura. Creo que Guabirá lo tiene”. En ese caso, el entrenador le dio la mano derecha a los directivos y quieren que haya un orden estructurado para poder llevar un club adelante y poder tener una buena temporada. Aun así, se aguarda porque el equipo empiece a levantar cabeza y pronto aparezcan los resultados favorables.